Analizar nuestro concepto de lo que significa ganar nos puede indicar cómo estamos viviendo nuestra vida. Redefinir su significado nos puede llevar a vivir más plena y felizmente. Hay una diferencia entre competir y competir con nosotros mismos, y una línea delgada puede llegar a separar una carrera de superación personal, de un vórtice de ansiedad, ego y depresión.
Probablemente te has encontrado a ti mismo persiguiendo un primer lugar vacío en lugar de enfocarte en ganar realmente una victoria personal llena de significado y crecimiento. En estas líneas quiero contarte una enseñanza de mi vida personal que me brindó las herramientas para liberarme de la trampa del primer lugar y enfocarme en el verdadero significado de ganar.
“Lo importante no es ganar, sino participar”
– Mi mamá
Recuerdo que me encontraba en primaria cuando fui elegida por los niños de mi salón como la candidata para representarlos en el concurso de reinas, el mismo que se celebraba cada año y en donde participaban niñas desde kínder hasta sexto grado.
Ese año la selección de la reina se realizaría por centavos (la moneda de más baja denominación del dólar estadounidense). Yo lo ignoraba, pero mi mamá ya sabía que era bastante difícil que yo pudiera ganar, ya que algunos padres de otras niñas contaban con mayor poder adquisitivo que mi familia, pero aún así, y con todas las dificultades de una mamá soltera y con poco salario, ella se las ingenió para que yo pudiera disfrutar de la experiencia.
«Te pueden ganar, pero no puedes dejarte vencer. Si es por actitud, que nadie te deje en el camino»
-Patricia Ramírez
Enfócate en Ser Mejor, No en Ser El Mejor
Antes de dar inicio a la semana de las actividades, mi mamá me sentó frente a ella y me dijo “Lo importante no es ganar sino participar,” me sentí confundida, luego continuó diciéndome que yo debía sentirme feliz porque mi familia me apoyaba, mis compañeritos también, que yo siempre iba a ser una ganadora, que tenía que dar lo mejor de mí, y sobre todo disfrutar la experiencia, que ese año ya yo era la reina de mi salón, sin importar cual fuese el resultado.
El día antes de la escogencia (la cuenta de centavos), se realizó una “charanga”. – Una charanga es donde un grupo de músicos tocan sus instrumentos, mientras las candidatas bailan y su barra las sigue al son de la música; como un pequeño carnaval. – Ese día cada niña tenía que decir unas palabras y ¿¡Adivinen qué dije yo!? La misma frase que me había dicho mi mamá: «Lo importante no es ganar, sino participar.»
¡La verdad que de esta actividad tengo los mejores recuerdos!
«El éxito de la vida no está en vencer siempre, sino en no darse por vencido nunca»
– Autor desconocido
Redefine Lo Que Significa Ganar
Cada esquema mental, idea, pensamiento o creencia, va a ser subjetiva dependiendo de nuestras experiencias, puede ser que esa frase que me dijeron a mí sea limitante para otras personas, o que los lleve a pensar entonces que no tiene sentido participar en una competición con el espíritu de perder, o que ganar es algo que no tiene méritos. Pero eso no es a lo que me refiero.
Para mí, y desde ese día, significa que tengo que atreverme, esforzarme, dar lo mejor de mí. Sí, esto me ha llevado a exigirme, pero siempre sabiendo que soy yo (mi mente y mis pensamientos) mi mayor oponente, que la vida es un “Ganar-Ganar”, ganas cuando te llevas el primer lugar porque te esforzaste y te destacaste, pero también ganas aunque no te hayas llevado el tan preciado primer lugar, simplemente porque ahora tienes más experiencia que antes.
«En medio de la dificultad reside la oportunidad.»
– Albert Einstein
Ganar Desde La Gratitud
Definitivamente los seres humanos somos competitivos por naturaleza, pero tenemos que reconocer cuando una competencia es sana y cuando no lo es. Claro que es importante seguir tus sueños, ir por tus metas, pero la realidad es que existen las situaciones difíciles y los contextos no tan agradables y debemos permitirnos el ser resilientes y hacer frente a las adversidades y sobre todo, salir fortalecido de las experiencias negativas.
No debemos ver el competir como algo negativo, este gestionado de la manera correcta es el que nos lleva a superarnos, a alcanzar objetivos individuales o de equipo, y es el que nos lleva a querer ser mejores cada día, es completamente necesario, sin embargo, en ocasiones se descontrola, llega a ser desmedido cuando nunca nada es suficiente, cuando no importa a quien se dañe y hasta llegamos a sabotearnos a nosotros mismos, por ese mismo nivel de insatisfacción autodestructiva.
Aquí no hay motivación que nos lleve a transformarnos, crecer o aprender, no se llega a disfrutar el camino recorrido o de los propios logros o de los logros de lo demás, ya que lo único que se desea es ganar por el hecho de ser superior al otro, donde se engrandece al ego y no se toma al logro, al éxito y al ganar como aprender o ser mejores nosotros mismos.
«La mayor gloria no está en no caer nunca, sino que en levantarnos cada vez que caemos»
– Confucio
El Fracaso No Existe, Sólo La Experiencia y el Aprendizaje
Es por todo esto que vemos a diario personas que son exitosas y lo tienen todo y aún así no se sienten bien consigo mismas y personas, que aún en sus propias dificultades ven lo mejor, y celebran cada paso como si ya hubiesen llegado a la meta.
Sé que algunas personas aún pueden estar en desacuerdo y de cierta manera se preguntarán ¿entonces, no hay que enfocarse en ganar?
Y mi respuesta es, ganar es significativo, valioso, prestigioso, pero no lo es todo, porque cuando las expectativas son muy altas y no nos encontramos preparados para enfrentar la situación, el “perder” va a ser frustrante y va a desequilibrar el bienestar emocional, aquí la importancia de las pequeñas metas. Entonces debemos enfocarnos en lograr un aprendizaje constante.
Debemos considerar enfocar ese espíritu competitivo y con sed de ganar, en que cuente con un sentido de equilibrio y que no se desvanezca cuando los resultados no son los esperados.
Un Abrazo,
Gaby.
Y antes de irme, te comparto estos últiles tips.
Claves Para Lograr Resiliencia
- Confían en tus propias capacidades, también sé capaz de reconocer tus puntos de mejora.
- Encuentra un equilibrio entre ser realista y optimista, asume tus experiencias difíciles como oportunidades para generar un cambio en ti, que te lleve a aprender y crecer.
- Sé consciente de que no puedes controlar todas las situaciones, hay cosas que no dependen de ti, enfócate en lo que sí puedes hacer.
- No te culpes, no seas demasiado exigente, sé compasivo contigo mismo y disfruta el momento.